Si se acaba de estrenar en el excitante, adictivo y a menudo confuso mundo del coleccionismo de relojes, probablemente le hayan surgido algunas dudas. Por ejemplo, «¿Cómo puedo evitar que me roben?» o «¿Cómo puedo asegurarme de que los relojes que compro tengan potencial de revalorización?» La comunidad de relojes, tanto en internet como fuera de internet, es muy amplia y está formada por buenas personas dispuestas a compartir sus experiencias, conocimientos y valoraciones honestas —a veces brutales— de su última compra. No está solo en este barco. Aprovechar esta entramado de personas puede ser tan fácil como unirse a unos cuantos grupos en Facebook o seguir los hashtags relacionados con los relojes en Instagram. Pero no olvide que una vez se entra en este mundo es muy difícil salir.
Si no dispone del tiempo suficiente o no está listo para sumergirse del todo, no se preocupe. Siempre puede sumergirse poco a poco. Este es el consejo que me hubiera gustado que me diesen cuando empecé a introducirme en el mundo del coleccionismo de relojes.
1. Olvídese del valor de reventa
En los últimos años, ha crecido entre un sector de la comunidad relojera darle excesiva importancia al valor de reventa de los relojes. Esto es generalmente para los más entendidos algo impropio. Como coleccionista, evidentemente siempre deseas no pagar en exceso por un reloj. De la misma manera, no hay nada malo en agregar una pieza a su colección que usted crea que pueda aumentar de valor en el futuro debido a su importancia, rareza, etc. Sin embargo, idealmente esta no debería ser su motivación principal para coleccionar relojes. Hay algunas personas oportunistas que solo buscan comprar relojes con el objetivo de revenderlos para obtener un beneficio en unos pocos meses. Esto es lo que se conoce como «flipper», y se ha convertido en algo generalizado en la comunidad relojera.
Valore usted mismo este tipo de conductas, pero yo diría que no debería ser el comportamiento de un verdadero coleccionista. Un coleccionista adquiere objetos que ama, que le hablan y que pretende conservar durante mucho tiempo. Claro que puede desenamorarse más rápido de lo que esperaba, algo que ocurre con frecuencia y que casi todos los coleccionistas que conozco han experimentado. Cuando eso ocurre es totalmente legítimo vender y hacer espacio a un modelo nuevo. Por contra, cuando se centra únicamente en el valor de reventa, limita enormemente sus opciones, lo que me lleva al siguiente consejo.
2. Esté abierto a nuevas posibilidades
El mundo de los relojes ofrece mucha más variedad de la que las revistas de moda muestran. Sí, están los grandes nombres que todos conocemos y amamos como Rolex, Omega, IWC y Seiko, pero también existen una gran variedad de marcas de alta calidad de las que probablemente nunca haya oído hablar. No me estoy refiriendo a las típicas marcas que aparecen en todas partes de repente y desaparecen seis meses después. Estoy hablando de fabricantes establecidos con historias consolidadas que carecen de la influencia del marketing para competir con los principales gigantes de la relojería. Por ejemplo, si le pregunta a cualquier verdadero fan de los relojes herramientas por una recomendación, seguramente la marca alemana Sinnaparecerá como una de las primeras opciones. Esta firma con sede en Fráncfort se estableció en 1961 y ofrece una enorme relación calidad-precio, pero, no obstante, sigue siendo relativamente desconocida entre aquellos que se interesan por los relojes de manera más esporádica.
La plataforma Chrono24 es el lugar perfecto para comenzar su búsqueda. Actualmente hay más de 500 000 productos activos en la web y le aseguramos que no todo es Rolex (aunque, por supuesto, también abunda esta marca). Complemente este consejo con visitas a foros y grupos en redes sociales relevantes. De esta manera, descubrirá rápidamente una selección de relojes más rica de lo que jamás se hubiese imaginado.
3. Establezca un presupuesto y no se salga de él
Esto siempre es difícil, pero saber lo que desea gastar, y lo más importante, lo que puede pagar, ayudará a tener una experiencia como coleccionista mucho más agradable. Esto no significa que no pueda desear modelos intocables que estén actualmente fuera de nuestro alcance —después de todo, soñar es gratis— pero como ya hemos comentado, el mercado de los relojes es tan grande que reducir opciones puede facilitarle la búsqueda. Nos guste o no, el precio es uno de los mejores filtros que existen. Además, podrá disfrutar mucho más de su compra sin tener que preocuparse de si su cuenta está en números rojos o de los crecientes intereses de su tarjeta de crédito.
Asimismo, conocer su presupuesto le ayudará a negociar su próxima compra. Cuando el corazón se involucra en estas cuestiones, es fácil pagar de más simplemente por la imperiosa necesidad de poseerlo. Por supuesto, esto puede no funcionar siempre, por esta razón hemos incluido el consejo número cuatro.
4. Acepte que cometerá errores
Independientemente de la indagación que haya realizado o las dudas que haya resuelto, en algún momento inevitablemente cometerá algún error. Tal vez acabe pagando de más, tal vez se despierte al día siguiente y descubra que en realidad no le gusta nada el reloj, o tal vez esa oferta que parecía tan buena, en el fondo no lo es. Intente no desanimarse. Todo forma parte del proceso de aprendizaje. De hecho, si le pregunta a cualquier coleccionista de relojes experimentado seguramente le podría explicar gustosamente historias sobre aquella ocasión (o, en algunos casos, ocasiones) en los que cometieron alguna estupidez.
Errar es humano. Lo importante es intentar salir del embrollo lo más rápido posible, anular las pérdidas y aprender la lección para la próxima. Ninguno de nosotros es perfecto, y el aprendizaje es un proceso. De hecho, si sirve de consuelo, tengo uno o dos relojes en el fondo del cajón de los calcetines que saco de vez en cuando y no puedo dejar de preguntarme cada vez que lo veo: “¿en qué estaría yo pensando el día que lo compré?”
5. Y sobre todo, sé fiel a ti mismo
Este es, de lejos, el consejo más importante de todos los comentados hasta ahora. Si sigue este consejo, seguramente no necesitará de los otros cuatro y siempre tendrá una experiencia agradable y gratificante como coleccionista de relojes. Es tan simple como: compre lo que desee. Sí, infórmese para que no le den gato por liebre, pero usted siempre tiene la última palabra, ya sea sobre cuánto paga por ello y sobre cómo quiere vestirlo. Todos, todos, tenemos una opinión igual de válida. Así que siga a su propia intuición y su muñeca se lo agradecerá.
