Patek Philippe Vintage
"Patek Philippe vintage: relojes altamente valorados
La larga tradición, ha permitido a Patek Philippe mantener una posición destacada en el mercado vintage. Desde modelos básicos hasta artículos de colección poco comunes, la excepcional calidad convierte a estas piezas en excelentes inversiones.
5 razones para comprar un Patek Philippe vintage
- Inversión de valor duradero
- El oro como material preferido
- Precios asequibles
- Ejemplares inusuales
- Amplia selección de relojes de forma
Los valorados relojes de lujo usados
Desde el año 1851, Patek Philippe se distingue por producir relojes de la más alta calidad. Pocas marcas gozan de tan preciada reputación como esta casa suiza. Innumerables relojes Patek han mantenido durante décadas un excelente estado de conservación. Su perdurabilidad y la preservación de su valor son las promesas más importantes que ofrece esta marca suiza.
Aunque haya pasado el tiempo, un reloj Patek Philippe siempre marcará tendencia. La firma también se caracteriza por apostar fuertemente por el oro macizo. Si busca un reloj de un valor inalterable, la marca Patek Philippe es en este ámbito la mejor. Los relojes de esta casa no solo sirven para conocer la hora y presumir de poseer una verdadera joya de relojería, también son una forma de inversión estable ante las crisis .
El diseño clásico de muchos relojes Patek supone parte de la inversión. Los relojes antiguos son especialmente deseados cuando lucen una estética neutra que no está sujeta a ningún tipo de moda. Pero, ¿cuál es el razonamiento detrás de esta idea? Si un reloj logró distinguirse por su sobriedad y belleza 50 o 60 años atrás y, actualmente se percibe de la misma manera, entonces se espera que esta valoración no cambie en las próximas décadas.
¿Cuánto cuesta un reloj vintage Patek Philippe?
Modelo | Precio (aprox.) | Características |
Nautilus Jumbo ref. 3700/3 | 100.500 € | Calibre JLC 920, fecha, diamantes, oro amarillo |
Calatrava Chronograph ref. 533 | 63.000 € | Función de cronógrafo, oro amarillo |
Calatrava ref. 1585 | 11.000 € | Pequeño segundero, oro rosa |
Top Hat ref. 1450 | 8.700 € | Pequeño segundero, oro amarillo |
Calatrava ref. 3520 | 7.000 € | Reloj de dos agujas, oro amarillo |
Horizontal Rectangular Ladies ref. 4183 | 2.200 € | Reloj de dos agujas, oro amarillo |
Calatrava vintage: elegancia clásica
La colección Calatrava ocupa un lugar privilegiado en el catálogo de la casa y se presenta como el buque insignia de la marca. La línea se produce desde el año 1932 y, por lo tanto, ha logrado establecerse en el mercado de segunda mano. Cuando Patek Philippe lanzó el modelo Calatrava, predominaba el estilo Bauhaus , un diseño que se distingue por prescindir de los adornos superfluos. La mayoría incluye agujas dauphine, índices bastón y un pequeño segundero a las 6 en punto. No obstante, también hay modelos que ofrece un segundero y números en la esfera.
El primer Calatrava tiene la referencia 96 y formó parte del catálogo de la casa hasta los años 70. Este fue el primer reloj de la marca en alojar el calibre de manufactura 12-200 de carga manual. Con sus 31 mm de diámetro, resultaba pequeño y, actualmente, se presenta como el tamaño perfecto para las muñecas delgadas. Los ejemplares en buen estado cuestan alrededor de 9.000 euros. Si prefiere un reloj más grande, le recomendamos el modelo de la década de 1930, es decir, la referencia 565 o la 570. Estos dos relojes miden 36 mm, su diseño se asemeja al de la referencia 96 y el precio de un modelo en buen estado de conservación se encuentra en el rango de los 31.000 euros.
La referencia 1585 y la 2526 son versiones del Calatrava que también son interesantes. El modelo 1585 fue el primero que se presentó en los años 40. Las asas tiene una particular forma de rollos de pergamino que, visualmente, hacen que el reloj resulte más grande. Un ejemplar en buen estado cuesta cerca de 11.000 euros. El segundo modelo, es decir, la referencia 2526, fue el primer Calatrava con un calibre automático (12-600AT). El precio de un reloj de la década de 1950 en buen estado de conservación ronda los 44.500 euros.
En los años 40, Patek Philippe ofreció un cronógrafo en la colección Calatrava bajo la referencia 533 . Este reloj de oro de 33 mm incluye una subesfera para el pequeño segundero a las 9 en punto, un contador de minutos a la altura de las 3 y la escala taquimétrica acompaña el borde de la esfera. Esta pieza de colección cuesta alrededor de 63.000 euros.
Tonneau y Ellipse: los relojes básicos de Patek
En el ámbito vintage se encuentra un elevado número de relojes Patek Philippe que no incluyen una caja redonda. La oferta presenta ejemplares con una caja cuadrada, rectangular, tonel u ovalada. Algunos de ellos ponen de manifiesto la continuidad de la marca y ciertos diseños ligeramente modificados han logrado mantenerse durante décadas. De hecho, algunos continúan formando parte de la colección Gondolo.
El ámbito de los relojes vintage permite acceder al mundo de Patek Philippe de una forma relativamente asequible . La selección de relojes por menos de 10.000 euros es amplia. Si busca relojes de pulsera especiales, le recomendamos la serie Top Hat.
El reloj rectangular con el calibre de cuerda manual 9-90 y el pequeño segundero a las 6 en punto datan del periodo antes de 1950. El nombre hace referencia a la construcción del reloj que se asemeja a la forma de un cilindro. Un Top Hat de oro cuesta alrededor de 8.700 euros. La versión de platino con índices engastados de diamantes puede llegar a costar algunos cientos de euros más.
No es inusual encontrar relojes vintage de Patek con una caja rectangular. La mayoría de estos modelos se fabricaron en los años 40 y su estilo comparte muchas semejanzas con los Cartier Tank. La mayoría presentan una caja de oro amarillo y cuestan entre 11.000 y 15.000 euros. Los modelos de los años 70 y 80, que realzan carácter de la época, pueden costar menos de 3.000 euros.
Los relojes de Patek Philippe con una caja en forma de cojín marcaron tendencia en los años 60. Entre ellos, destacamos la referencia 3525 y la 3527. El primero, con su esfera redonda y caja casi cuadrada, resulta más clásico, mientras que el modelo hermano se distinguía por realzar la esencia de aquellos años. Su esfera mantiene la misma forma de la caja y es un poco más ancha que alta. Además de su estética, los dos modelos también alojan diferentes calibres: el 3525 equipa un calibre automático y el 3527 oscila al ritmo de un movimiento de carga manual. Dependiendo del estado de conservación, estos relojes cuestan entre 7.000 y 8.900 euros.
Nautilus vintage: el clásico deportivo
Teniendo en cuenta la larga tradición de la casa, la serie Nautilus es una de las más jóvenes. Ha pesar de esto, la colección goza de una gran reputación y desempeña un papel muy importante en el mercado vintage. Los modelos con la referencia 3700, fabricados en los años 70, son particularmente populares. Cuentan con un calibre automático 28-255 C que basa su construcción en el legendario calibre 920 de Jaeger-LeCoultre. Un ejemplar de acero en buen estado cuesta alrededor de 69.000 euros, y el precio de las versiones de oro amarillo engastadas de diamantes asciende a los 100.000 euros.
Los modelos de la década de 1980 con el número de referencia 3800 son una alternativa asequible. Con 38 mm de diámetro, son un poco más pequeños que su predecesor de 42 mm y alojan el calibre de manufactura 335 SC. El precio oscila entre los 20.000 y los 23.000 euros. Los relojes femeninos son aún más asequibles, incluyen un movimiento de cuarzo y su precio se encuentra en el rango de los 8.000 euros.
Relojes de bolsillo: un trocito de la historia de Patek
En contraposición, los relojes de bolsillo de Patek Philippe se asocian claramente al pasado. Poseen el encanto del ayer y, dado que los relojes de bolsillo apenas han cambiado su aspecto en más cien años, incluso en los modelos de producciones actuales, el límite entre los relojes vintage y retro fluye de manera continua. El precio de un reloj de bolsillo fabricado en oro amarillo en buen o muy buen estado de conservación es de 5.000 euros aproximadamente.
Los fundadores y las patentes
La marca Patek Philippe existe desde el año 1851. Antoni Patek (1811–1877), un emigrante polaco, fundó la firma junto a su socio francés Adrien Philippe (1815–1894). Un año antes de la fundación de la compañía, Philippe marcó un hito en la historia de la relojería. El talentoso joven inventó la corona que permitía cargar y ajustar los relojes de bolsillo sin necesidad de utilizar accesorios. Recordemos que en aquella época era habitual utilizar una llave para proporcionar energía al mecanismo.
En el año 1851, Patek y Philippe viajaron a la exposición mundial en Londres donde consiguieron llamar la atención de una ilustre clienta. La Reina Victoria se hizo con dos piezas de relojería de la firma. Con el tiempo, se unieron otras casa reales a la exclusiva lista de clientes. Tampoco la joyería neoyorquina Tiffany & Co. dejó pasar la oportunidad de solicitar 130 relojes de la firma suiza. Cabe señalar que la manufactura también cuenta con varias patentes: en el año 1902, el primer cronógrafo doble y en el año 1925 le siguió la patente del primer reloj de pulsera con calendario perpetuo.
Los hermanos Jean y Charles Henri Stern fabricaron durante un largo periodo de tiempo las esferas de los relojes de Patek Philippe. Mantuvieron una estrecha relación comercial hasta que en el año 1932 compraron la compañía. Desde entonces, la familia Stern dirige la empresa que, desde el 2009, preside Thierry Stern. A día de hoy, Patek Philippe produce cerca de 50.000 relojes al año y, junto a Rolex, es una de las pocas firmas que ha logrado mantener su independencia.