Omega Seamaster 300

El Seamaster 300 es un verdadero clásico entre los relojes de buceo. Forma parte del catálogo de Omega desde 1957 y, para la casa, goza del mismo estatus que el Submariner para Rolex o el Fifty Fathoms para Blancpain. Originalmente creado para los buzos de la Marina y los profesionales del ámbito, el Seamaster 300, resistente al agua a 300 m (30 bar) se ha convertido en un reloj deportivo muy popular, perfecto tanto para las actividades al aire libre, como para las ocasiones más formales.

La apariencia del Seamaster casi no ha sido modificada en sus más de 60 años de historia. Su diseño continúa estando caracterizado por su aguja para las horas en forma de flecha y sus marcadores horarios en forma de triángulo. Los números arábigos a las 3, 6, 9 y 12 horas ya aparecían en el Seamaster 300 original, la ref. CK2913. Los índices y agujas continúan siendo luminiscentes, como el punto de la posición cero del bisel de buceo.

Técnicamente, sin embargo, ha experimentado una constante evolución. Además del acero inoxidable, la serie también ofrece materiales como el titanio, el platino, la cerámica y la aleación propia de Omega denominada Sedna Gold (una mezcla de oro, cobre y paladio). En 2021, se introdujo otro material en la serie, el Bronze Gold, una aleación de bronce, oro, plata y paladio más resistente a la corrosión y respetuoso con la piel.

Los movimientos utilizados a lo largo de su existencia también han ido modernizando su tecnología. Así, por ejemplo, los modelos actuales no solo equipan el escape Co-Axial de Omega, también ofrecen un certificado Master Chronometer otorgado por el Instituto Federal Suizo de Metrología (METAS). Esto significa que los relojes garantizan una alta precisión, son resistentes a las perturbaciones y son capaces de tolerar campos magnéticos de hasta 15 000 gauss.

Omega ofrece una amplia selección de modelos Seamaster 300 que se diferencian entre sí principalmente por los materiales utilizados. Las ediciones actuales están disponibles con una caja y un brazalete de acero, oro, titanio, Bronze Gold o platino. La piel completa la gama de pulseras de la colección.

Los precios varían considerablemente de variante a variante del 300. La alternativa más económica es el modelo de acero inoxidable de 41 mm con esfera negra, bisel de cerámica negro y el calibre Master Co-Axial 8400. Puede reconocer esta variante por las cifras blancas luminiscentes impresas sobre la esfera a las 3, 6, 9 y 12 horas. Asimismo, el logo de Omega y el nombre del modelo aparecen a las 12 horas, mientras que a las 6 en punto aparece la inscripción "Master Co-Axial Chronometer". Este reloj con correa de piel puede comprarse por unos 5200 €. La variante con brazalete de acero inoxidable cuesta unos 200 € más de media.

Omega ofrece una variante técnicamente idéntica de titanio. Puede reconocer este modelo por su esfera azul oscura y su inserción del mismo color en el bisel. Sin estrenar, este reloj de titanio con correa de piel cuesta alrededor de 6500 €. La variante con brazalete de eslabones de titanio se vende, sin estrenar, por unos 6600 €.

El Seamaster 300 también está disponible en variantes bicolor, tanto de acero y oro amarillo o Sedna, como de titanio y la aleación de oro rosa de Omega, el oro Sedna. Puede comprar un ejemplar de acero inoxidable y oro amarillo por precios entre los 6700 € o 10 000 €, dependiendo de si se decide por una correa de piel o un brazalete metálico. Los ejemplares con oro Sedna cuestan por regla general unos 400 € más. En cambio, para los modelos de titanio y oro Sedna deberá invertir algo más dependiendo del material de la pulsera. Los precios de estos modelos se encuentran entre los 8900 € y 11 300 €.

La actualización de 2021 del Seamaster 300

En 2021, Omega presentó una variante actualizada del Seamaster 300. Esta se diferencia de su predecesor en pequeños detalles. Por ejemplo, en este reloj late el calibre 8912.

Asimismo, el dial de este nuevo modelo, como los de los modelos vintage de los años cincuenta, es una esfera sándwich, formada por dos capas. En la capa superior negro mate, los números e índices se encuentran fresados, y la inferior cuenta con un recubrimiento de lumen vintage, por lo que los números brillan a través de los orificios de la capa superior. La esfera es un milímetro más ancha que la del modelo predecesor, pero esto no repercute en el diámetro total del reloj, que continúa siendo 41 mm.

Otra característica de estos relojes es la punta del segundero, que tiene forma redonda. Por su forma, este tipo de agujas se conocen como segundero "lollipop" o piruleta y son típicas de los modelos Seamaster vintage de los años cincuenta.

Omega ofrece este reloj de acero inoxidable con esfera negra o azul y con brazalete de acero o pulsera de piel. Los precios, según la versión, oscilan entre los 5500 € y 6000 €.

Omega ofrece el Seamaster 300 en variantes de oro amarillo, oro Sedna, Bronze Gold o platino. Los modelos de oro amarillo o Sedna albergan el calibre Master Co-Axial 8401, que solo se diferencia del 8400 por presentar un puente del volante y un rotor de oro rojo. Sin estrenar, el precio de un Seamaster 300 en oro amarillo con correa de piel ronda los 17 200 €, mientras que el precio de la variante con brazalete de eslabones de oro de 18 quilates asciende a unos 26 700 €. Los precios de los modelos de oro Sedna tienen unos precios similares. Para hacerse con unos de estos modelos con correa de piel habrá de invertir alrededor de 15 900 € y, con brazalete de oro, unos 27 900 €.

El Seamaster 300 con caja de Bronze Gold forma parte de la colección desde 2021. Esta aleación de bronce, oro, plata y paladio ofrece más ventajas que el bronce convencional: este material irrita menos la piel y desarrolla una pátina más lentamente. A conjunto con el tono de la caja, la esfera, tipo "sandwich" es de un color marrón oscuro y posee material luminiscente de aspecto vintage. El corazón del reloj es el calibre 8912 certificado como Master Chronometer. El precio de este reloj ronda los 10 000 € en Chrono24.

En 2019, Omega presentó dos modelos más con caja de oro amarillo. La diferencia más llamativa con los otros modelos de oro es, sin duda, sus esferas más coloridas. Estas están fabricadas de malaquita verde y lapislázuli azul, respectivamente, dos minerales que ya se utilizaban en la antigüedad. La inserción del bisel y la correa de piel de aligátor conjuntan con el color de las esferas. En su interior late el calibre de manufactura 8913, también certificado como Master Co-Axial Chronometer. La variante verde cuesta unos 20 400 € y es más barata que los ejemplares con esfera azul, cuyo precio asciende a unos 26 300 €.

Relojes de platino: exclusivos y elegantes

Desde inicios de 2020, puede adquirir también el Seamaster 300 con esfera de malaquita o lapislázuli en una versión de platino. Exceptuando el material de la caja, estos relojes son idénticos a los correspondientes de oro. El precio de un ejemplar con esfera verde de malaquita ronda los 40 000 €. La versión azul de lapislázuli tiene precios que rondan los 32 000 €.

Como alternativa, Omega ofrece también en la colección relojes de platino con la esfera azul oscuro de la variante de titanio del Seamaster 300. La inserción del bisel y la correa de piel son también de este color. Sin embargo, estos modelos son de edición limitada. Del modelo con correa de piel, que puede comprar por unos 28 800 €, solo existen 757 ejemplares, mientras que la variante con brazalete de platino está limitada a tan solo 375 ejemplares. El precio de este reloj tan exclusivo ronda los 44 500 €.

¿Quiere sentirse como el prestigioso agente secreto James Bond? Entonces le recomendamos el modelo Spectre, una edición especial del año 2015. Desde el punto de vista técnico, se trata de un Seamaster 300 básico de acero inoxidable. Sin embargo, la edición limitada de 7007 piezas del Spectre presenta un segundero "lollipop" o piruleta, la leyenda 007 en el cierre y la misma correa negra NATO que llevó Daniel Craig en la película. Otras diferencias: el bisel no tiene la habitual escala de 60 minutos, sino una escala de 0 a 11, lo que lo hace adecuado para mostrar un segundo huso horario. Además, el 12 de la esfera es sustituido por el logotipo de Omega. El precio de un ejemplar de este reloj James Bond ronda los 10 500 €.

Omega lanzó en 2017 la edición Seamaster 1957 Trilogy, limitada a 3557 ejemplares, con motivo del 60.° aniversario del Seamaster 300. Se trata de una réplica del original del año 1957. A diferencia de su modelo hermano que mide 41 mm de diámetro, esta versión presenta una caja de 39 mm, un segundero sin punta de flecha y un bisel mucho más estrecho que gira en ambas direcciones, como el modelo original. A diferencia de la versión estándar, el fondo no es de cristal de zafiro, sino de acero inoxidable. Además, aloja el moderno movimiento Master Chronometer 8806. Sin estrenar, este bonito reloj cuesta alrededor de 7300 €.

Los modelos vintage del Seamaster 300 son muy codiciados por los coleccionistas, sobre todo los modelos de los años 50 con la referencia CK2913. Omega produjo esta serie entre 1957 y 1961 y, durante este tiempo, lanzó diversas variaciones al mercado. Estas se diferencian tan solo en detalles pequeños, como la forma del segundero o el tipo de bisel. Dependiendo de la variante por la que se decida y en qué estado esté el reloj, los precios del CK2913 oscilan entre los 13 000 € y los 24 000 €.

Los modelos de series posteriores son notablemente más baratos. Un Seamaster con la referencia 14755 en buen estado cuesta de media unos 9000 €. Los ejemplares de la referencia 165.014 de a mediados de los años 60 se sitúan en un rango de precios similar: su precio ronda los 9800 €.

La colección Seamaster nació a finales de los años 40 como una pieza de múltiples usos para el hombre común. Aunque su nombre indica lo contrario, las versiones anteriores de este reloj no fueron diseñadas específicamente para trabajar bajo el agua. Contradictoriamente, en sus inicios, este modelo alzó el vuelo y acompañó las misiones de los pilotos de la Real Fuerza Aérea Británica, "Royal Air Force". Sin embargo, con el modelo 300 presentado en 1957, Omega cambió el concepto de uso del reloj y lo optimizó para satisfacer las exigencias de los buzos.

En los años en que el submarinismo empezaba a desarrollarse, surgió el primer Seamaster 300 (ref. CK2913) como herramienta para acompañar a los buzos militares y profesionales, entre ellos, el oceanógrafo francés Jacques Cousteau y su equipo. En el año 1963 emprendieron la inmersión Precontinent II en la costa sudanesa del mar Rojo donde experimentaron la vivencia bajo el agua. En el ámbito militar, Omega equipó a los soldados de las fuerzas navales británicas con el legendario 300.

Si 300 m de hermeticidad no son suficientes para usted o prefiere un modelo con función de cronógrafo, le recomendamos el Planet Ocean 600M de la colección Seamaster.