No cabe ninguna duda de que el Patek Philippe Nautilus es uno de los relojes más codiciados de nuestros tiempos. Pero seamos sinceros por un momento: por muy importante que sea el Nautilus para el mundo de la relojería, el aspecto de este icono deportivo apenas ha cambiado desde 1976, y los precios de mercado han alcanzado alturas astronómicas a pesar del descenso que hubo a mediados de 2022. Por ese motivo, me he planteado la siguiente pregunta: ¿deberíamos dirigir nuestra atención a otras alternativas mejores y más baratas? ¿O todavía merece la pena comprar un Patek Philippe Nautilus ahora que ya ha llegado el 2023? Le presento tres razones por las que creo que la respuesta es un «sí» rotundo. Siempre y cuando disponga del presupuesto necesario, claro.
Razón n.º 1: el Patek Nautilus es un auténtico icono
En el sector de los relojes, se habla a menudo de iconos. Y no es de sorprender: algunos relojes legendarios, como el Rolex Submariner o el Omega Speedmaster, no solo son obras de arte con un diseño atemporal. Gracias a su gran historia, también se han labrado un nombre más allá del mundo de los aficionados a los relojes. Pero el icono por excelencia es, sin ninguna duda, el Patek Philippe Nautilus. Aunque el Audemars Piguet Royal Oak fue el primer reloj de acero que se introdujo en el segmento del lujo y el Nautilus solo se lanzó años después a modo de respuesta al golpe de genialidad de Audemars Piguet, el Patek Philippe Nautilus ha contribuido en gran parte a que los relojes de lujo sean tal y como los conocemos a día de hoy. Fue uno de los primeros relojes de lujo fabricados en acero y que disponía de una caja deportiva. En una época en la que los relojes de lujo no eran más que delicadas piezas de joyería hechas con metales preciosos y los relojes deportivos de acero funcionaban como herramientas, lo que Patek Philippe había ideado con el Nautilus era impensable. Su creador, Gérald Genta, es tan legendario como el propio reloj. Gérald Genta es para el mundo de la relojería lo que Battista «Pinin» representa para el sector del automovilismo: un genio y un visionario responsable de diseños atemporales e increíbles que nunca caerán en el olvido. El mero hecho de que un diseñador tan legendario trabajase en este reloj le aporta un valor extremo. El Patek Philippe Nautilus es el reloj más icónico de entre los iconos, así como una leyenda absoluta de la relojería. Y estoy seguro de que eso no cambiará en 50 años.
Razón n.º2: el Nautilus es elegante y nunca pasará de moda
Seamos sinceros: existen tantos relojes como granos de arena en la playa, ¿pero cuántos relojes de lujo hay que realmente sean elegantes y atemporales? Mientras que muchos fabricantes de relojes de lujo renuevan por completo sus modelos más antiguos de vez en cuando, se me ocurren muy pocos relojes que hayan sido capaces de sobrevivir sin apenas cambios estéticos y permanezcan prácticamente inalterados incluso después de décadas, sin haber perdido por ello ni un ápice de popularidad. Me vienen a la cabeza los iconos de Rolex, relojes herramienta como el Omega Speedmaster y el Breitling Navitimer, y el legendario Royal Oak de Audemars Piguet. Pero ahí acaba la lista.
En el caso del icono de Patek, estamos ante un logro particularmente notable: cualquier entusiasta de los relojes reconocerá tanto en la caja como en el brazalete integrado que este modelo procede de los años 70, pero, a pesar de ello, el reloj no resulta en absoluto anticuado o desfasado. Todo lo contrario: el delicado exterior del Patek Philippe Nautilus es todo lo que el dueño de un auténtico reloj de lujo podría desear, pero el reloj de Genta destaca por su deportividad. La esfera con efecto degradado, que se vuelve más oscura desde fuera hacia dentro, es de una belleza impresionante y luce un acabado perfecto que resulta casi hipnótico. A la luz del sol, el intrincado diseño de la esfera despliega todo su potencial y nos ofrece unos maravillosos juegos de luz que nos harán mirar el reloj una y otra vez. El Patek Philippe Nautilus es un reloj de lujo tan elegante como casi ningún otro, y está garantizado que nunca pasará de moda. Es la simbiosis perfecta entre el lujo y el estilo deportivo. Ningún otro reloj de lujo alcanza este equilibrio con tanta maestría como la leyenda de Patek.
Razón n.º 3: el Patek Philippe Nautilus es una inversión
Aunque los precios de los relojes de lujo volvieron a descender un poco en 2022, el Patek Philippe Nautilus es y sigue siendo uno de los relojes más rentables que existen. Si bien el icono de Patek perdió algo de su valor en el año 2022, las cifras siguen hablando por sí solas. Por un ejemplar sin estrenar de la nueva referencia 5811/1G de oro blanco con esfera azul se piden más de 200 000 € actualmente. La variante más moderna de la legendaria referencia 5711 con esfera azul, que ya no se fabrica, se vende por más de 120 000 €, y el precio de mercado actual de la variante de acero con esfera verde, también descatalogada, puede alcanzar cifras entre los 300 000 € y 350 000 €. Con unos precios tan desorbitados, las versiones de oro del legendario 5711 casi parecen una ganga en comparación. Estos modelos son algo menos populares entre los usuarios de relojes y coleccionistas que sus homólogos de acero. No obstante, al final apenas importa si se trata de una versión de la leyenda de Patek de acero, de oro o equipada con complicaciones. El Patek Philippe Nautilus es y continuará siendo una atractiva inversión, así como uno de los relojes de lujo más dignos de colección de todos los tiempos. Ahora que ha habido una corrección en el mercado de relojes, podría volver a ser una gran oportunidad para incluir por fin el icono de Genta en su colección. Siempre y cuando disponga del presupuesto necesario para ello, por supuesto. La mayoría de nosotros nos tendremos que contentar con soñar con este reloj.