Los nombres Audemars Piguet y Piaget suenan parecidos. Igual que sus historias. Mientras que Audemars Piguet fue fundada en 1875, Piaget se creó un año antes, en 1874. Ambas empresas han experimentado un desarrollo impresionante. Si bien en sus inicios fabricaban principalmente relojes de bolsillo, pronto se dedicaron a los relojes de pulsera. Piaget se concentró en los relojes ultraplanos y los relojes joya, mientras que Audemars Piguet se centró en las complicaciones especialmente sofisticadas.
Incluso hoy en día, las dos marcas difieren significativamente en estilo y apariencia. Mientras que Audemars Piguet solo puede adquirirse en las boutiques de la propia marca, lo que implica tener que aguantar largos tiempos de espera, Piaget puede encontrarse también en algunas relojerías concretas sin esperar.
Pero, ¿cuál de las dos marcas es mejor y más interesante? Veamos qué marca vence en este duelo.
Diseño y estilo
El estilo de Audemars Piguet lo resume fácilmente el icónico Royal Oak. Desde que el diseñador estrella Gérard Genta lo creó para Audemars Piguet, ha sido el modelo más popular de la marca y su fama no ha dejado de crecer. Hoy en día, gran parte de la colección de la marca gira en torno a este icono: ya sean deportivos, con diseños menos comunes o elegantes, casi todos los modelos (aparte de unos pocos relojes de vestir clásicos) incorporan en igual medida el ADN de Genta.
En cambio, en Piaget, los protagonistas son más bien los relojes para la jet set. Ya sean engastados con piedras preciosas, ultraplanos o de oro macizo, los relojes Piaget saben atraer todas las miradas. Más que desprender una elegancia tranquila, lo que desprenden es chispa y resplandor. La artesanía con joyas y piedras preciosas de Piaget no tiene nada que envidiar a la relojería.
Lo que ambas marcas tienen en común son los elevados estándares de calidad que hacen de cada reloj una obra maestra. Tanto si le atrae más la elegancia deportiva del Royal Oak de Audemars Piguet como los resplandecientes relojes joya de Piaget, haga caso a su corazón y elija aquella marca que se adapte más a su personalidad.
Calidad y artesanía
Como entusiasta de la relojería, me resulta difícil emitir un juicio en este aspecto. Al fin y al cabo, ambas marcas son maestras de su oficio y dan pruebas impresionantes de ello con cada reloj. Pero como esto va de mojarse, es justo decir que no es casualidad que Audemars Piguet haya conseguido convertirse en una de las mejores firmas en el arte de la relojería.
Aquí es donde se encuentra ese algo que distingue lo «muy bueno» de lo «único». Esto, además, permite también la colaboración con maestras de otras disciplinas, como la orfebre Carolina Bucci.
Colecciones y modelos de relojes
Una cosa que ambas marcas comparten es que su colección de relojes más famosa es un modelo deportivo. En Audemars Piguet se trata del emblemático Royal Oak, en Piaget el Polo. Aunque este último es un elegante reloj deportivo, no ha conseguido los niveles de fama del Royal Oak. Sin embargo, este último modelo ocupa tanto espacio en Audemars Piguet que solo existe en el catálogo otra colección, en este caso centrada en los relojes tradicionales, la colección Code 11.59.
Piaget, en cambio, adopta un enfoque diferente y ofrece numerosos relojes femeninos y relojes joya, además del Polo. Por ejemplo, la colección Limelight o la línea Altiplano, con piezas extravagantes que desdibujan los límites entre reloj y joya. Así pues, Piaget compensa con diversidad la falta de un icono y pone a las mujeres en el punto de mira.
Funcionalidad y tecnología
Aunque el reloj deportivo sea el protagonista en ambas marcas, no hay que olvidar que sus relojes siguen siendo obras maestras artesanales y no smartwatches. Los relojes de ambas marcas son ante todo objetos de lujo y deben tratarse con extremo cuidado. No quiero decir que tengan que estar todo el día entre algodón y seda o que solo se puedan llevar en contadas ocasiones. Pero sí que creo que es mejor dejarlos en casa si se realizan actividades en las que los relojes puedan sufrir muchos golpes y sacudidas, como podría ser en el tenis.
Una cosa buena de que sean relojes delicados es que seguro que le recompensarán con tecnologías apasionantes. Mientras que Audemars Piguet es un maestro en el campo de los calibres automáticos en particular, Piaget es conocida por sus calibres ultraplanos llevados hasta la perfección. Como ve, la innovación forma parte del ADN de ambas casas. A mí en particular me encanta el hecho de que Piaget siempre se supere a sí misma con un nuevo reloj aún más plano, de hecho, los calibres ultraplanos de Piaget me parecen sencillamente inigualables.
Estabilidad de precio y valor
El precio siempre es un tema delicado en los relojes de lujo. Muchos se preguntarán, ¿es justo que un reloj valga tanto cuando un smartphone muestra la hora con mucha más precisión? Pues la verdad es que sí, las dos marcas, sin duda, valen lo que cuestan. Ambas empresas tienen una larga historia y un saber hacer artesanal excepcional a sus espaldas. Y esto, por supuesto, se paga. No obstante, los modelos básicos de Piaget son significativamente más asequibles que los de Audemars Piguet y, debido a esta mayor accesibilidad, Piaget gana para mí en términos de precio.
En términos de estabilidad del valor, el punto se lo lleva Audemars Piguet. La demanda de ciertos modelos de esta marca ha aumentado tanto, sobre todo en los últimos años, que aumentan de valor inmediatamente después de la compra. En cambio, los relojes Piaget suelen estar disponibles de inmediato y no hay que esperar varios años para poseer uno.
Conclusión: ¿Audemars Piguet vs. Piaget?
Tanto si elige Audemars Piguet como Piaget, obtendrá un reloj magistral. Para mí, como amante de los relojes deportivos, Audemars Piguet siempre saldrá ganando. Sin embargo, si alguna vez cambiara de estilo y buscara algo más elegante, como un auténtico reloj joya, Piaget sería probablemente mi primera elección, precisamente porque sé que allí encontraré el mejor.
